sábado, 28 de noviembre de 2009

Danzando al borde del abismo


Me acostumbré a danzar al borde del abismo
Al compás de las notas de aquella melodía que jamás aprendí,
voy invocando movimientos antagónicos a mi existir
donde el riesgo está armado de valor, con la posibilidad imposible de caer
Mi cuerpo va expectante al sentir de estos movimientos
mientras que mis manos son los dolores que se agitan hasta no sentir
mis ojos la esperanza, mi vientre la alegría y en mi pecho su armonía
Debo continuar con este riesgo de caer en este abismo, de levantarme de él
seguir danzando al compas de las notas de esta melodía y tal vez seguir cayendo
El daño es un riesgo obvio en la melodía , llamada vida
jamás aprendida, por sus notas tan llenas de ironías
el amor es su excusa, el miedo su defecto, el bailarla su contexto.